El periodista Antonio Lobato ha querido compartir en su cuenta oficial de Twitter (@alobatof1) una situación que entiende injustificada y que a todos nos ha pasado alguna vez. Un radar de la M-30 de Madrid le ha cazado superando el límite de velocidad. Pasó a 74 km/h en una zona de 70 km/h. Superaba el el máximo y le pillaron. Y, unos días después, la sanción le ha llegado a casa.
Todo normal, como un particular más. Y su enfado es el mismo que puede tener cualquier hijo de vecino. Sin embargo, lo que no esperaba es la cantidad de reacciones que ha provocado por parte de los habituales de esta red social donde no solo ha recibido zascas de todo tipo él; sino el mundo del motor en general. Atención a la creatividad de algunos asiduos de la red social.
Algunas de las respuestas más ocurrentes
Los hay que se lo han trabajado creando una sanción de la Fórmula 1.
Otros se han acordado de Gonzalo Serrano, de cuando ambos compartían retransmisión de la Fórmula 1 en Telecinco, y de la frase que solía decir justo antes de que el semáforo se pusiera en verde.
Los hay que han recordado la campaña que hizo por la seguridad vial.
Otros que han ligado a la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, con las órdenes de equipo que Massa recibió en su época de Ferrari cuando Fernando Alonso se le acercaba por detrás y debía dejarse adelantar por el español.
Quienes han pensado en que con su coche Fernando Alonso podría superar la falta de competitividad del McLaren.
Otros han pensado en los tradicionales dichos españoles.
Si supera el límite de velocidad…
Finalmente, en sus siguientes intervenciones en la misma red social, Antonio Lobato se queja de las dificultades para reclamar por estar fuera de tiempo y para recurrirla. Pues en la web del Ayuntamiento de Madrid es un lío por la cantidad de formularios colgados que hay.
Bromas aparte, son varios los que le recuerdan que 74 km/h es exceso de velocidad por lo que la multa está bien puesta; y no son pocos los que le muestran casos similares a los que ha experimentado él, donde no se les han aplicado el margen de error que se supone tienen estos radares. O, incluso, multas que han recibido en otros países por exceder el límite en solo 1 km/h el límite.
