Aviñó obtuvo 45 votos por 21 de Carlos Gracia en las elecciones a la presidencia
Manuel Aviñó se impuso en las elecciones a la Federación Española de Automovilismo (RFEdA) a Carlos Gracia, que ha mantenido el cargo los últimos 32 años. El actual presidente de la Federación Valenciana de Automovilismo se impuso en la Asamblea General por 45 votos a 21. Había 70 votos en juego, aunque hubo 3 ausencias y un voto en blanco. Uno de los ausentes fue Fernando Alonso, doble campeón del mundo de la Fórmula 1. No se podía delegar el voto y no había voto telemático.
Aviñó lideró una candidatura de cambio con el lema #otraRFEDA por la que pretendía romper con la política llevada a cabo en los últimos años por Gracia, quien tras 32 años era el presidente más longevo de una federación deportiva en nuestro país.
Contaba con mayoría anticipada
Aviñó contaba con mayoría de apoyos. Eso es al menos lo que salió de las elecciones a la Asamblea General celebrada hace un mes y por el que el valenciano obtuvo apoyo un gran éxito entre los estamentos de clubes y deportistas, siendo sus candidatos elegidos mayoritariamente.
Esto le colocaba en una situación de ventaja ante las elecciones celebradas ayer, a pesar de que ya había habido algún miembro con capacidad de voto que había advertido de que cambiaba su intención de voto.
Cambio de una era
Nuevos tiempos en una Federación que ha recibido muchas críticas por la gestión personalista de Carlos Gracia, con acusaciones de todo tipo, pero que durante su gestión ha conseguido situar al automovilismo español en lo más alto del automovilismo internacional, tanto a nivel de pilotos, con campeonatos en el Mundial de Rallies, de Fórmula 1 y el Dakar, y a nivel estamental, pues el propio Carlos Gracia es vicepresidente de la FIA.
Su primera victoria electoral fue en 1984 y desde entonces ha conseguido la victoria de forma consecutiva en las elecciones de 1988, 1992, 1996, 2000, 2004, 2008 y 2012.
Ahora llega Manuel Aviñó, que disfruta de su segundo mandato al frente de la federación valenciana. Pretende reformar la federación y su funcionamiento interno. Entre sus propuestas está limitar a un máximo de tres los mandatos para un presidente electo, una reestructuración del organigrama de la federación para reducir gastos, algo que en lo que también bajaría a la mitad el sueldo del presidente, buscar nuevas vías de ingresos, recuperar la confianza de las marcas para que apuesten por las diferentes competiciones nacionales a nivel oficial y den apoyo, y organizar un campeonato de monoplazas que se sitúe como un primer paso para los jóvenes que salen del karting.
