No lo verás en el salón de París, pues la marca ha decidido no acudir a la muestra francesa, pero el Bentley Bentayga Diesel ya es una realidad. La firma de lujo de origen británico se ha lanzado a la piscina en los últimos meses, no hace falta hablar de años, y es que ya ha presentado su primer SUV y ahora lo hace con motor diésel. ¿Nos hemos vuelto locos? Tanto como el no menos impresionante Audi SQ7.
¿Por qué hablo del Audi SQ7? Pues porque comparten algo más que casa matriz. Era de esperar, conociendo los planes de la firma británica de lanzar un Bentayga diésel, que el modelo adoptaría la misma mecánica, el motor diésel más capaz que actualmente comercializa el gigante alemán VAG. Así, son dos modelos idénticos mecánicamente, aunque hay algunos detalles que cambian sustancialmente sus ambiciones.
A simple vista no diferenciarás una versión de otra, pero la mecánica cumplirá un papel fundamental. Se trata de un bloque V8 diésel de 4,8 litros que acude a varios tipos de sobrealimentación. Por un lado una pareja de turbos, por otro un compresor de accionamiento eléctrico. Y con ello logra una potencia de 435 CV y un majestuoso par de 900 Nm. Parecen cifras suficientes para un Bentley, ¿no? Junto con él, un cambio automático de 8 velocidades y un sistema de tracción a las cuatro ruedas.
Utiliza un sistema eléctrico de 48V, que será el futuro, y Bentley ha optado por darle algo más de vida a su modelo frente al deportivo Audi. La velocidad máxima se eleva hasta los 270 km/h, frente a los 250 km/h del alemán. Lo que no cambia es la capacidad de aceleración, solo 4,8 segundos para el 0 a 100 km/h. Aunque suene distópico en un Bentley el consumo medio homologado es de 7,3 l/100 km.
A falta de conocer más detalles como el precio o su comercialización, parece que será antes del final de 2016 cuando ya esté disponible en los concesionarios. Ahora bien, el precio sí será sustancialmente superior al del Audi SQ7, superando los 200.000 € de tarifa.
