El BMW 530d xDrive nos ha encantado por casi todo, pero sobre todo por su arsenal dinámico y por un motor turbodiésel soberbio.
BMW 530d xDrive: fotos
[fotos id=”80931″]El BMW 530d xDrive es elegante y sofisticado y hace que casi nos olvidemos del BMW Serie 7. Ha cambiado, desde luego, aunque si no tenemos delante a sus predecesores cuesta más distinguir las modificaciones realizadas en esta séptima generación del BMW Serie 5. Incluso, puede que le confundamos con sus hermanos BMW Serie 3 y BMW Serie 7.
Esta idea de plantear una gama de modelos con una línea de diseño muy similar es algo común en nuestros días, nos guste o no, y BMW no es una excepción. Lo bueno es que, en el caso de nuestro protagonista, también toma lo mejor de sus compañeros de marca.
Equilibrio, en definitiva, para el que busque un coche dócil y refinado cuando deba, pero igualmente rápido y sorprendentemente ágil en los momentos de máxima exigencia. Como base, hemos elegido a una mecánica que responde perfectamente a todos estos adjetivos. El BMW 530d xDrive se apoya en un delicioso motor turbodiésel de seis cilindros en línea con un compromiso perfecto entre eficiencia y prestaciones. Es el más potente de gasóleo, de momento, ofertado por la casa.
BMW 530d xDrive: tecnología
De un vistazo, el BMW Serie 5 presume de un auténtico arsenal tecnológico. En el exterior, los faros adaptativos con tecnología de tipo LED ofrecen una iluminación excelente. Puede circular con las largas puestas en todo momento; el vehículo se encarga por sí solo de alumbrar el interior de la curva y de atenuar una zona determinada cuando viene un coche de frente o nos acercamos a otro usuario de la vía.
Eso sí, este lujo (1.763 euros), como muchos otros, se paga aparte, aunque la dotación de fábrica sí que trae los faros de LED no adaptativos.
Del mismo modo, este BMW agasaja al conductor con un habitáculo que requiere aprendizaje. En virtud de la cantidad de asistentes y sistemas disponibles, pide tiempo para profundizar en todas las nuevas funciones.
El sistema multimedia de la firma alemana, asociado a una pantalla digital de gran resolución y a un mando de control muy bien diseñado, ahora introduce el manejo táctil y gestual. El primero nos parece menos útil, hay que desviar demasiado la vista de lo importante (la carretera); el segundo, por su novedad, resulta más práctico para acciones determinadas. Por ejemplo, haciendo la señal de victoria podemos cambiar de emisora o manejar otros elementos previamente establecidos.
Hay mucho más equipamiento que refuerza la impresión de calidad del conjunto. La instrumentación digital, el enorme sistema de proyección de información en el parabrisas (Head-up display) o el sistema de entretenimiento en las plazas traseras son algunos de los más representativos; todos opcionales. Para poner un poco más de énfasis en esa imagen elegante, nuestra unidad incluye la línea de acabado Luxury, con más empaque por dentro y fuera.
BMW 530d xDrive: habitabilidad
En lo que respecta al espacio, el nuevo BMW Serie 5 saca una buena nota. No le damos el sobresaliente porque, aunque dedica unas cotas holgadas para los dos pasajeros de atrás (el tercero ha de vérselas con menos centímetros y con el molesto túnel central de transmisión), teniendo en cuenta que la carrocería mide casi cinco metros de largo hay modelos mejor aprovechados. Ahora bien, el maletero es muy profundo y permite cargar el equipaje de toda la familia sin problemas.
BMW 530d xDrive: comportamiento
En cualquier caso, la comodidad de la que gozan todos los ocupantes es de primera, fruto de una insonorización muy lograda y de un chasis que filtra perfectamente el terreno. En este sentido, una vez en marcha muestra un comportamiento ejemplar. Ahora, hemos notado más salto entre los diferentes modos de conducción posibles, con la novedad del nuevo programa Adaptive.
Viene, opcional junto a la suspensión adaptativa, también incluidos en nuestra unidad: con solo pulsar el botón correspondiente, el coche ajusta automáticamente dirección, amortiguación, motor y cambio, en virtud del estilo de conducción de cada cual. Además, los perfiles ECO PRO y Sport son más completos, ya que permiten establecer una configuración personalizada en la respuesta de acelerador y suspensión.
La cualidad que más remarca este automóvil bávaro es el confort. En vías rápidas ofrece viajes muy placenteros, lo que no es óbice para que se defienda con gran solvencia en tramos revirados.
En curvas de velocidad media da una confianza tremenda, y hasta resulta inesperado que en los ángulos más cerrados posibilite una transición muy fluida con ciertos matices deportivos.
Para ello, goza de ayudantes de primer nivel, como la tracción total xDrive y el paquete Adaptive Drive; integra el citado control electrónico de suspensión y también barras estabilizadoras activas (ya no trabajan de forma hidráulica, sino eléctrica), encargadas de minimizar los movimientos y balanceos de la carrocería.
BMW 530d xDrive: motor
Para redondear el conjunto, el motor turbodiésel de seis cilindros en línea y 3,0 litros arroja potencia sobrada para convencer en todos los ámbitos. Hablamos de 265 CV y de una entrega de fuerza constante desde bajo régimen. Las vibraciones de este bloque son casi inexistentes, se mueve con gran suavidad y poca sonoridad, al menos desde el interior. Y si piensas que sus elevadas prestaciones (ojo, acelera de 0 a 100 km/h en solo 5,4 segundos) castigan el consumo se equivocará.
En nuestro recorrido habitual de pruebas, tocando distintos escenarios y al ritmo más alto de circulación, hemos conseguido bajar de 7,0 l/100 km de media. Y en carretera, es factible reducir otras cinco décimas, pues el modo de conducción “a vela” (disponible en ECO PRO) funciona con gran eficacia en ciertos momentos. El nuevo BMW 530d xDrive solo se vende asociado al cambio automático Steptronic, con convertidor de par, de ocho velocidades. Un buen compañero en virtud de su excelente quehacer en cuanto a rapidez y suavidad de funcionamiento.
BMW 530d xDrive: precio
Mención aparte para el equipamiento, a la postre condicionante del precio de cada Serie 5. A saber: si el coste base de este BMW 530d xDrive es de 63.300 euros, el que se aprecia en las fotos se va por encima de 100.000. No obstante, entre sus “gadgets” destacados y adicionales figura la visión noctura BMW Night Vision con reconocimiento de peatones, el completísimo paquete Driving Assistant Plus (con todos los apoyos a la conducción imaginables, hasta de dirección para mantener el centro del carril hasta 210 km/h), asistente de adelantamiento…
BMW 530d xDrive: conclusión
El salto tecnológico del nuevo Serie 5 es admirable… si está dispuesto a pagar el elevado coste de sus incontables extras. Me quedo con su brillante motor y con un bastidor que no elude una conducción muy dinámica
BMW 530d xDrive: valoración
Imagen: 4
Acabados: 5
Puesto de conducción: 4
Habitabilidad: 4
Maletero: 4
Motor: 5
Recuperación: 5
Prestaciones: 5
Dirección: 4
Caja de cambios: 5
Frenos: 4
Estabilidad: 4
Consumo: 4
*5 es lo máximo, 1 lo mínimo
Texto: Juan Pablo Esteban.
Fotos: Paloma Soria.
BMW 530d xDrive: ficha técnica
| Tipo de motor | Diésel, 6 cilindros en línea, turboalimentado |
| Cilindrada | 2.993 cm3 |
| Potencia | 265 CV a 4.000 rpm |
| Par | 620 Nm entre 2.000 y 2.500 rpm |
| Velocidad máxima | 250 km/h (autolimitada) |
| Aceleración | 5,4 s (0 a 100 km/h) |
| Consumo | 5,0 l/100 km (mixto) |
| Medidas (L/An/Al) | 4.936 / 1.868 / 1.479 mm |
| Neumáticos | 225/55 R17 |
| Peso en vacío | 1.695 kg |
| Maletero | 530 l |
| Precio base | 63.300 euros |
BMW 530d xDrive: equipamiento
DE SERIE. Airbags frontales, laterales y de cabeza para conductor y acompañante, airbags de cabeza traseros, control de tracción DTC, antibloqueo de frenos ABS, repartidor electrónico de frenada EBD, asistente en frenadas de emergencia DBC, estabilizador DSC, control de frenada en curva CBC, monitorización de presión de neumáticos, freno de estacionamiento electromecánico, asistente al arranque en pendientes, tracción total xDrive, control de velocidad de crucero, control dinámico de la conducción Driving Experience Control con ECO PRO, dirección asistida EPS con Servotronic, parada y arranque automáticos del motor Auto Start/Stop, sensores de aparcamiento delanteros y traseros, retrovisores calefactados de plegado eléctrico, faros y pilotos LED, sensores de lluvia e iluminación, climatizador bizona, ordenador, asientos delanteros eléctricos, navegación Business con pantalla digital de 8,8 pulgadas, radio, 6 altavoces, lector de CD, Bluetooth, toma USB, llamada de emergencia, servicios ConnectedDrive y llantas de aleación de 17 pulgadas.
OPCIONES. Pintura metalizada Mineralweiss (1.160 euros), línea Luxury (tapicería y volante deportivo de cuero, moldura interior de madera, línea cromada exterior…; 4.394 euros), Driving Assistant Plus (control de velocidad de crucero adaptativo, asistentes de retenciones y dirección, de frenada de emergencia automática con detección de peatones y de luces de carretera, reconocimiento de señales de tráfico Speed Limit Info (alerta por cambio de carril, control del ángulo muerto y advertencia de colisión lateral, entre otros; 3.314 euros), portón eléctrico (663 euros), Adaptive Drive (suspensión y estabilizadoras activas; 4.202 euros), Head-up display (1.408 euros), llave con pantalla (296 euros), Parking Assistant Plus (1.302 euros), audio Bowers & Wilkins (5.503 euros), climatizador de cuatro zonas (970 euros), ventilación activa de asientos delanteros (959 euros), cambio automático deportivo (296 euros), instrumentación digital (462 euros), BMW Night Vision (2.367 euros), navegación Professional (887 euros) y llantas de 19 pulgadas (828 euros).
