Aún faltan unos meses para que llegue la nueva generación del BMW Serie 2. Mientras tanto, la firma alemana nos alegra la espera con ediciones especiales como el BMW M2 CS.
Qué mejor manera de mantener el atractivo de un modelo que está estirando su actual generación a la venta, y que ya tiene anunciada la llegada de su relevo, que lanzando ediciones especiales que lo convierten en un vehículo radical. Es el caso del BMW M2 CS, un sedán deportivo que sube la apuesta que ya presentó el BMW M2 Competition y que se sitúa como lo más parecido a un coche de competición que uno puede tener para uso diario.
Se presenta con un motor de seis cilindros en línea, el mismo que ya tenía el M2 Competition, aunque incrementa su potencia en 40 CV hasta los 450 CV. Por el momento no se ha comunicado la fecha del inicio de su comercialización ni su precio aunque ya se puede encontrar información en la web oficial de la firma alemana.
En sí mismo, el BMW M2 CS es el vehículo del que partirá el nuevo BMW M2 CS Racing con el que la firma alemana participará en competición según el nuevo reglamento Clusport que llegará en 2020.
Aún más radical
El BMW M2 Competition añade deportividad a su figura, un rango del que ya iba sobrado. Ahora muestra una estética más agresiva con un capó de nuevo diseño (con nuevas tomas de aire para refrescar la mecánica), un techo desarrollado en CFRP, un nuevo splitter delantero, un alerón que bordea la tapa del maletero y un difusor trasero hecho en fibra de carbono. El conjunto se cuadra con un nuevo tono de pintura metalizada Misan Blue (azul).
En el interior vemos un panel fabricado íntegramente en fibra de carbono al que se puede sumar un nuevo volante multifunción M Sport con acabado en Alcantara y unos asientos de tipo baquet M Sport, en ambos casos con costuras en rojo.
Mecánica afinada
Esta edición especial no llega solo con una extra de potencia, sino que se ha afinado la mecánica para sacar el máximo provecho de esos 450 CV. Este puede ir unido a una caja de cambios manual de 6 relaciones o una automática de 7 velocidades, al mismo tiempo que dispone de varios programas de conducción entre los que se incluyen los propios de circuito.
Llega la suspensión Adaptativa M, ahora solo presente en el BMW M4 mientras que los amortiguadores se pueden configurar en posiciones Comfort, Sport y Sport+. Y los frenos también crecen llegando a los 400 mm de diámetro en el eje delantero y a 380 mm en el eje trasero, con pinzas de seis pistones delante y cuatro detrás.
En el listado de opcionales queda un equipo de frenos carbocerámicos más ligeros y capaces en situaciones de conducción límite (en circuito). Otros que aumentan de tamaño son los neumáticos. Tanto en el eje delantero como en el trasero serán de 19 pulgadas, aunque en el posterior contará con una banda de rodadura mayor. Las ruedas delanteras tendrán la medida 245/35 R19 mientras que la trasera es de 265/35 R19.
De la estabilidad, en el BMW M2 CS se encargará una centralita que buscará siempre la óptima entrega de potencia pero también una barra estabilizadora que une ambas torretas y un diferencial activo multidisco que optimiza la tracción. El modo de conducción M permite hasta un deslizamiento controlado, para que la derrapada sea mantenida.
De la melodía se encargará el nuevo escape de doble rama y cuatro colas del que se podrá controlar la intensidad del sonido que emita.
Velocidad controlada
Tal dispendio de mecánica destinada al circuito pero homologada para el uso diario permite al modelo llevar el velocímetro hasta los 100 km/h desde parado en solo 4 segundos (4,2 segundos con caja manual) mientras que la velocidad máxima queda limitada a 280 km/h.
