El BMW M550i xDrive 2017 de 462 CV es la versión más deportiva de la Serie 5 de BMW a la espera del todopoderoso BMW M5. Su precio, 100.600 euros.
BMW M550i xDrive 2017: fotos
[fotos id=”76981″]Texto: Alejandro Méndez
¿Alguna vez has deseado poseer un BMW M5 pero piensa que es demasiado coche o, tal vez, hasta te intimida? No te preocupes, la propia BMW tiene la solución. Se llama M550i xDrive y, a todos los efectos es, como un BMW M5: potente, elegante, brioso… pero no hace falta ser piloto de carreras para llevarlo.
La marca bávara quiere mantener a toda costa el liderato en cuanto a limusinas deportivas se refiere, y para ello presenta una suerte de pseudo-M5 que, digámoslo así, no es un auténtico M5 (más que nada porque la propia firma no lo vende así) pero sí que se comporta como tal en casi todos los aspectos.
Ojo, que no hay que tomar esto como un desprecio hacia el nuevo BMW M550i xDrive 2017 sino todo lo contrario. Ahí va la clave: ¿Has probado a buscar algún dato sobre él en la página oficial de BMW? Inténtalo, pero no lo encontrarás en el apartado M. Por el contrario, se incluye dentro del catálogo de la Berlina 5, y no de los “tocados” con la M mágica, así que es, a todas luces, una berlina convencional, vitaminada y afinada para que ejerza como la más potente y deportiva de la casa (al menos hasta que llegue el futuro BMW M5).
BMW M550i xDrive 2017: exterior
En un primer momento su aspecto exterior podría no destacar para un neófito, y pasar por un modelo de la BMW Serie 5 más. Pero los más avezados detectarán ciertos detalles estéticos que pronto harán pensar en “algo más”.
El paquete aerodinámico M incluye un alerón trasero sobre la tapa del maletero, que acentúa su aspecto deportivo y optimiza el flujo de aire alrededor y sobre el vehículo. Además, espejos retrovisores, tomas de aire delanteras y laterales, y marcos de los riñones de la parrilla frontal están enmarcados con un elegante gris metálico Cerium Grey.
Para rematar el conjunto, la zaga lleva una doble salida de escape (aunque en realidad es cuádruple, al agruparlos de dos en dos). Como colofón, los neumáticos pueden ir en llantas de aleación ligera M deportivas de 20 pulgadas con radios dobles, estilo 668M. Y aún hay más.
BMW M550i xDrive 2017: interior
El habitáculo recibe a los ocupantes con una placa metálica, a modo de felpudo de bienvenida, decorada con el logo M Motorsport y la tribanda azul-morado-rojo, junto con la nomenclatura del modelo, 550i.
Los asientos deportivos M pueden ir acabados en cuero exclusivo Nappa, o también en cuero Dakota, y ribeteados con costuras en hilo claro, que ofrecen un atractivo contraste. Y todo el interior puede llevar molduras en aluminio o madera, a gusto del consumidor (por descontado, como en todo el catálogo BMW, son múltiples las opciones de personalización bajo pedido). Volante de cuerpo deportivo M de última generación, pedalier de aluminio y un cuadro digital cambiante según el modo de conducción elegido, completan un interior a la vez serio y discreto, con tintes deportivos.
Al hilo de esto, y como una de las pocas notas en contra, el diseño del cuadro es demasiado similar al resto de gama (cosa lógica por otro lado), se aprecia un tanto artificial, habida cuenta de lo que usan algunos competidores y en absoluto hace justicia al talante deportivo del coche.
Materiales de alta calidad y excelentes ajustes en todo el habitáculo (remates en el salpicadero, interior de puertas, techo, alfombras y tapicerías) van en consonancia con lo que se espera de la firma alemana.
BMW M550i xDrive 2017: motor
Una vez que estás situado en el asiento del conductor y oprimes el botón de arranque empiezas a ver en qué te has gastado los más de 100.000 € (precio base) que cuesta este modelo. El capó delantero aloja un motor de gasolina de 8 cilindros en V y casi 4.500 cc, que ofrece 462 CV de potencia entre 5.500 y 6.000 rpm, con una cifra de par máximo de 650 Nm disponible a partir de 1.800 rpm y hasta las 4.750.
Equipado con dos turbocompresores Twin-Scroll y especialmente modificado, en este propulsor se plasma toda la tecnología de alto rendimiento de la firma que comprende, entre otros, inyección directa de alta precisión, control variable de válvulas Valvetronic, y también del árbol de levas Doble-Vanos; un compendio de tecnología y fuerza con el que el 550i es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 4 segundos, y, como toda berlina de alto rendimiento, su velocidad máxima está limitada electrónicamente a 250 km/h.
BMW M550i xDrive 2017: comportamiento
Asociada al motor va una caja de cambios deportiva Steptronic de 8 velocidades que puede ser controlada mediante las levas del volante, y que permite los cuatro modos de conducción ya disponibles y conocidos para otros modelos: Eco-pro, Comfort, Sport y Sport +.
Pero si algo caracteriza a este modelo, y definitivamente lo diferencia del M5, es su sistema de tracción integral xDrive, algo que ofrece un ‘plus’ de seguridad a los menos avezados (o los más atrevidos) que se pongan al volante de un vehículo con casi 500 CV, y que garantiza un óptimo control del mismo y de toda su potencia en todas las superficies sea cual sea su estado.
Los más puristas puede que no vean a éste como un auténtico deportivo de la familia M; en cierto modo no lo es, pero sí que funciona perfectamente como antesala de la berlina deportiva por excelencia de la casa alemana y, a la espera de que aquélla sea presentada de manera oficial, el 550i xDrive puede lucir con orgullo la M que precede a su nombre.
