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BMW, dispuesta a parar la producción del Mini por culpa del Brexit

BMW, dispuesta a parar la producción del Mini por culpa del Brexit
BMW, dispuesta a parar la producción del Mini por culpa del Brexit

BMW, dispuesta a parar la producción del Mini por culpa del Brexit

Uno de los coches británicos más icónicos puede ver peligrar su producción en Reino Unido. Al menos, de forma temporal. Así lo ha anunciado el Grupo BMW , que no dudará en cerrar la planta en la que se fabrica el Mini en Oxford si la Unión Europea y el gobierno británico no llegan a un acuerdo que haga efectivo el Brexit. Por ahora, la medida sería solo temporal; no se ha puesto sobre la mesa un cambio definitivo.

Hemos programado el periodo de mantenimiento anual del próximo año en la planta de Mini en Oxford al 1 de abril, cuando el Reino Unido salga de la UE, para minimizar el riesgo de una posible interrupción del suministro de piezas a corto plazo si no hay acuerdo sobre el Brexit”, señaló BMW. Cabe señalar que el grupo, de origen alemán, puede ver peligrar muchos de sus intereses comerciales si no se llega a un buen acuerdo político y económico entre ambos bloques.

El Brexit y los fabricantes de automóviles

Eso sí, desde la marca de coches germana también han querido lanzar un mensaje tranquilizados al otro lado. Cabe señalar que BMW ensambló cerca de 220.000 automóviles en su planta de Oxford el año pasado. Así, han explicado que ven muy poco probable que se dé el “peor de los escenarios”; pero que, aún así, ya han comenzado a idear un plan por si es necesario activarlo. Recordemos que la salida de Reino Unido de la Unión Europea se deberá hacer efectiva el 29 de marzo de 2019.

La marca alemana no ha sido el único fabricante de coches que ha dado la voz de alarma con el tema del Brexit. Hace solo unos días, desde Honda se aseguró que una falta de acuerdo entre Londres y Bruselas que dificulte la ruptura pacífica y consensuada les supondrá un coste de “decenas de millonres”. Y otro gigante de la automoción británica,  Jaguar Land Rover , ha decidido que sus trabajadores de Castle Bromwich trabajan solo tres días a la semana; la medida ha afectado a 2.000 empleados y se mantendrá hasta diciembre.