Los fabricantes de automóviles huyen de Reino Unido ante la llegada del Brexit.
Las Islas Británicas gozan de muy buena salud en cuanto a cultura automovilística se refiere. No así sus fabricantes, ni aquellos que han construido plantas de ensamblaje o fabricación de coches más allá del Canal de la Mancha. Los fabricantes nacionales, tras múltiples crisis, han ido dejando su independencia en manos de grupos con mayor volumen y poder, sólo resisten algunos fabricantes de vehículos artesanales. Pero, el Brexit podría hacer que la nación de los Bentley , MG, MINI , McLaren, Lotus, Caterham, Rolls-Royce, Morgan, Aston Martin… dejase de fabricar vehículos. Al menos los más populares.
La opción de un Brexit duro, es decir, sin acuerdo; dará al traste con la fabricación de vehículos en Reino Unido. No sólo de las marcas nacionales, también de aquellos que decidieron crear sus plantas de ensamblaje en este país para abastecer Europa.
Todo es competitividad
Los británicos pueden estar a punto de perder sus ventajas competitivas con la salida de la Unión Europea. Marcas como Nissan , Honda , Land Rover o Toyota fabrican en Reino Unido vehículos para toda Europa. Algunos también se exportan a otros continentes.
La no pertenencia del país anglosajón a la Unión Europea sin un acuerdo aduanero supone que cualquier mercancía procedente de este tendrá que pagar aranceles. En consecuencia será más caro poner en el mercado cada vehículo. Algo que no interesa a los fabricantes.
Los japoneses y Land Rover como punta de lanza
Toyota ha llegado a afirmar que, de producirse un Brexit duro, podría irse del país. Actualmente se fabrica el Toyota Corolla en Burnaston, empleando a 3.200 persona de forma directa. Asimismo, esta pérdida supone la salida del mayor fabricante mundial del tejido industrial de la nación.
Nissan, por su parte, ya ha anunciado que dejará de fabricar el Nissan X-Trail en sus instalaciones de Sunderland. Todavía se fabrican otros modelos en la misma planta como el Nissan Micra, pero no se sabe si los más de 6.000 puestos de trabajo directos de esta factoría desaparecerán en los próximos meses. También se habla de mantener su nivel competitivo a base de subvenciones, debido a que esta fábrica se sitúa en un área deprimida del país.
Este es uno de los casos de compañía que cuenta con planta en nuestro país y que podría verse favorecida por esta salida de las islas británicas. En Barcelona, Nissan produce el Nissan Navara, el Nissan Evalia y, hasta hace unos años el Nissan Pulsar. Tiene experiencia en la producción de camperos y compactos por lo que podría ser una excelente manera de mantener la producción de estos modelos dentro de la Unión Europea.
La tercera en discordia es Honda. El fabricante japonés ha confirmado el cierre de su planta de Swindon, dónde se ensamblaban los Civic y CR-V con destino a los Estados Unidos y Europa. En este caso, los empleos que se perderán de forma directa suman 3.500 a una lista que no es pequeña.
Hasta las marcas nacionales
Land Rover prescindirá del 10 por ciento de su plantilla, es decir, 4.500 trabajadores. Esto se debe a la caída en la venta de motores diésel y los discretos resultados en China. Al mismo tiempo, la inauguración de la nueva planta de Eslovaquia y la intención del grupo Tata de fabricar vehículos eléctricos en Wolverhampton, también habrán influido en la decisión.
Otro nacional que emigra es MINI, que podría trasladar una parte importante de su producción a Holanda; parando la producción en abril. No se conoce todavía el número de trabajadores afectados. Rolls-Royce, también de BMW, piensa en una opción semejante. Aunque nunca abandonando Reino Unido por completo.
Por último, Vauxhall, la versión anglosajona de Opel, cuenta con dos fábrica en Gran Bretaña: la primera en Ellesmere, donde se fabrica el Astra; la segunda en Luton, donde produce furgonetas. Una de estas cerraría si se produjese un Brexit duro. Quedarían en la calle 3.000 empleados más.
Una decisión política
La conclusión de esta situación es bastante sencilla: si Reino Unido logra un acuerdo aduanero con la Unión Europea es posible salvar más de 10.000 empleos directos. De lo contrario, además de perderse estos puestos de trabajo también se perderán muchos indirectos.
Por otra parte, está España. Somos el octavo país productor de coches del mundo. Las fábricas de automóviles de España están implantas así como la industria auxiliar. Contamos con plantas de Nissan, PSA (Citroën, Peugeot, Opel), Ford, SEAT, Volkswagen, Renault… y producimos todo tipo de vehículos, desde urbanos y comerciales hasta híbridos.
Sería este buen momento para recibir parte de la producción que está cerca de abandonar aquel país. Aunque la tendencia de las marcas, en algún caso ya está anunciado oficialmente, es el de buscar países donde los costes de producción sean más económicos que el nuestro.
