El sueño fue el causante de 120 fallecimientos en las carreteras en 2018. Te indicamos cómo prevenirlo.
Uno de los factores que más víctimas producen en nuestras carreteras es el sueño. Es esta una de las razones por las que los viajes nocturnos son más peligrosos estadísticamente que los diurnos, por la facilidad de que este aparezca esa temida somnolencia. Así, aunque la densidad del tráfico sea menor en esas horas debemos evitar estar horas para conducir. Pero no es lo único que hay que tener en cuenta, aA continuación aportamos consejos y soluciones para mejorar tu seguridad.
Recordemos que la somnolencia o sueño puede aparecer en cualquier momento y no solo porque sea de noche. Esta puede surgir después de una copiosa comida, por el aburrimiento que encontramos al volante o tras el estrés acumulado en las horas precedentes. Hay situaciones en las que nos sentamos en el coche y aparece el sueño.
La necesidad de dormir
El sueño nos afecta a todos y el riesgo se eleva considerablemente si tenemos que luchar contra él. Dormir es necesario para nuestro organismo, a la altura de comer o beber. Nuestro cerebro tiene una “batería” y cuando se agota necesita recargarse.
En cuanto detectamos estas posibles señales es importante entender que debemos responder pues hay peligro real de quedarse dormido. Es algo parecido a cuando aparecen las necesidades fisiológicas, no podemos esperar para siempre, podemos retrasarlo pero hasta un límite.
Las soluciones caseras no tienen resultado
Las bebidas energéticas o bajar la ventanilla no nos quitará el sueño, solo una sensación de frescor inmediata que al poco tiempo se irá tornando en un sueño más profundo. El único modo de recuperarse es darle descanso a nuestro cerebro. Es importante tener en cuenta que el sueño es fundamentalmente necesario para nuestra cabeza, el elemento que coordina e integra la unidad de mando de nuestro organismo.
Lo que sí podemos hacer es retrasar la aparición de estos síntomas y, lo más importante, aprender a identificar cuándo debes parar para descansar.
Pautas a seguir antes de un viaje
El cuerpo necesita descanso llegado el momento así que, llegado el momento y siendo conscientes del nuestro cansancio acumulado y nuestras costumbres, la primera recomendación es la más obvia: descansa antes de salir de viaje.
Otros factores importantes son aquellos que nos producen modorra, si bien cada uno de nosotros tiene elementos que le afectan de diferente modo los tres principales son la digestión, la sed y el calor.
Hay que descansar antes del viaje, especialmente la vista. Para ello debemos evitar hacer uso del teléfono o de pantallas justo antes de salir de viaje. Lo ideal sería situarse en una habitación con el mayor silencio posible y es recomendable cerrar los ojos durante unas horas. De este modo, aportaremos el descanso necesario a nuestros ojos:
- Revisa correctamente el alumbrado del coche. Es muy importante llevarlo bien regulado para reducir la fatiga de tu vista y, en consecuencia, reducir el sueño derivado de este sobre esfuerzo. Este es un aspecto muy importante durante la noche.
- Lleva bebida fresca y sin alcohol, parece obvio pero conviene recordarlo. Si bebes cada poco tiempo te mantendrás hidratado y lograrás una sensación de frescor en la boca.
- Comidas ligeras. Lo comentaba antes, uno de los factores que dan lugar a la somnolencia son las digestiones pesadas, tras una comida ligera será más complicado que los efectos de la digestión nos afecte.
- Mantén el climatizador bajo, debe estar bajo pero nunca por debajo de los 20 grados. La razón es exactamente la misma que la de las cenas ligeras, el calor adormece.
- No fumes ni dejes que tus acompañantes lo hagan. Fumar y el humo de los cigarrillos contribuye a que nos llegue antes el sueño y la modorra. Por otra parte, si un agente de control de tráfico lo considera una distracción, podrá sancionarnos.
- Elije bien tu ropa. No se le da el valor que tiene pero es importante. Debemos evitar la ropa pesada, ya que nos acerca a los reinos de Morfeo. Es su lugar es aconsejable llevar ropa ligera y cómoda, ir en mangas de camisa.
- Algo que también debes escoger bien es la música. Es mejor no contribuir al estrés de nuestro cerebro, por ello no es aconsejable poner música agresiva. Pero tampoco demasiado lenta. Es factible encontrar un término medio entre ambos, algo que anime pero no te estrese.
- Que los pasajeros duerman al inicio del viaje. Solemos pensar en que mantener al conductor despierto de charla es beneficioso. Nada más lejos de la realidad, a todos los compañeros de viaje les llega la hora del sueño de forma más o menos sincronizada. Lo aconsejable será que los acompañantes duerman al inicio del viaje así conducirás fresco. Si llega el sueño podrás despertarle y pedirles conversación. Y, si fuera necesario, pedirle el relevo al volante.
Cómo saber que necesitamos parar
A excepción de los narcolépticos el sueño nos invade de forma progresiva a todos. Aunque una vez ha comenzado es imposible frenarlo, por lo que tendremos que buscar un buen lugar donde descansar.
Los remedios caseros no funcionan. La mejor opción es dormir, aunque sea en el coche y 20 minutos, tiempo suficiente para haber recuperado el 80 % de la vigilia. En cuanto aparezcan estos síntomas deberías buscar un lugar donde estacionar en condiciones de seguridad (más adelante indicamos los lugares en los que hay que parar):
- Picor de ojos. Uno de los primeros síntomas en aparecer. Es detectable por el aumento en la frecuencia de parpadeo.
- Aumento de la percepción de los sonidos. El oído es un sentido que, de forma permanente, queda activo mientras dormimos. Antes de quedarnos dormimos nuestro oído se pone “en modo sueño”, por lo que tendremos la sensación de oír todo ligeramente más alto.
- Bostezos. El síntoma más conocido y evidente de que necesitamos dormir, especialmente si estos se repiten o son más largos de lo normal. El mecanismo del bostezo sirve para dotar a nuestro cerebro de una dosis extra de oxígeno, el cuerpo se relaja y necesita de más aire para seguir funcionando.
- Por último, la sensación de inquietud. Parece contradictorio pero antes de dormirnos solemos movernos mucho en el asiento, cambiando de postura con frecuencia sin encontrar acomodo. Muchos lo hacemos pensamos que así nos despertamos. Lo cierto es que el efecto es el contrario.
Microsueños, la guadaña silenciosa
Es posible estar dormido con los ojos abiertos, es una de las formas de sueño más peligrosas para los conductores. Estos microsueños nos hacen sentir despiertos pero no vemos ni sentimos nada durante unos segundos (esto pueden ser muchos metros con el coche sin control). Prácticamente la totalidad de los conductores los ha padecido alguna vez.
Un ejemplo muy habitual es el de ir conduciendo pero desconocer por qué o cómo te has ido cambiando de carril o tomado una salida sin haberlo previsto. La reacción muchas veces es dar un volantazo para recuperar la posición o regresar a tu carril. A veces es un ligero impacto contra el guardarraíl u otro elemento el que no saca de este estado catatónico.
El último de los efectos de estos microsueños es el de cerrar los ojos. Durante este tiempo vemos lo último que estos han grabado. Esta es la razón por la que creemos seguir despiertos. Los microsueños son extremadamente peligrosos, los organismos oficiales achacan al cansancio el 10 % de los accidentes con víctimas mortales (el año pasado fueron 120 fallecidos).
Casi siempre pensamos que se trata de un despiste, pero debemos ser conscientes de que el sueño hace mella. Lo más importante en ese momento, por ti y los demás ocupantes de la vía, es parar y dormir antes de provocar un accidente.
Los mejores sitios para dormir en carretera
Es posible que no tengamos un hotel cerca y que estemos lejos de nuestro destino todavía. Lo más acertado, es parar y dormir en nuestro coche.
- Lo mejor es hacerlo en áreas de descanso vigiladas, dónde suele haber gasolineras 24 horas e iluminación. Puedes aprovechar para tomarte algo y estirar las piernas, de este modo harías la digestión durante tu sueño.
- Otra opción es desviarse al primer pueblo que veamos. Es fácil caer en la parada rápida en un área de descanso sin vigilancia, oscura y con poco movimiento, pero estos lugares suelen ser frecuentados por amigos de lo ajeno. Por ello es más aconsejable es una calle no demasiado transitada de cualquier pueblecito con farolas.
- Las dos últimas opciones son el área de descanso sin vigilancia, extremadamente útil de día, y un apartado en una carretera. Ambos espacios tienen el problema de la inseguridad por nuestras pertenencias, pero la segunda de ellas añade cierto peligro de accidente. Debemos evitarlas si es posible.
