Por mucho que desde la Dirección General de Tráfico (DGT) se alerte de los peligros de ponerse al volante tras haber consumido alcohol, muchos son los conductores que no aprenden. Ejemplos de estos casos hay a manos llenas. Por ejemplo, según los datos arrojados por el equipo de Pere Navarro, este verano 2018 han aumentado un 15% las víctimas mortales en nuestras carreteras; y el alcohol ha estado presentes en una gran parte de estos accidentes.
Uno de los últimos casos conocidos se produjo hace unos días en La Rioja. Allí, el pasado domingo, un conductor estampó su coche contra un árbol en la LR-111 en el término de Ezcaray. Previamente había embestido el lateral de un coche, por lo que las autoridades ya estaban sobre aviso. Cuando llegó el equipo de atestados de la Guardia Civil al lugar, se encontraron que el conductor del vehículo (un todoterreno Nissan Patrol) quintuplicaba la tasa de alcohol.
Alcohol y sin carné de conducir
Al hacerle la prueba de alcoholemia, los agentes de la Benemérita observaron perplejos que el hombre (de treinta años y natural de Rumanía), presentaba una tasa de alcohol en aire espirado de 1,27 mgr/l. Esto es más de cinco veces la tasa permitida, que se encuentra en 0,25 mgr/l. Pero esta fue solo la primera de las sorpresas, ya que cuando se le requirió la documentación, la Guardia Civil comprobó que el hombre conducía sin permiso.
Tal y como informa LaRioja.com, no es que se le hubieran retirado los puntos; es que nunca ha tenido carné de conducir. Por ello se le ha acusado de dos delitos contra la seguridad vial; fue detenido y puesto a disposición judicial. Por suerte, no hubo que lamentar heridos o víctimas; tanto el conductor como el resto de pasajeros resultaron ilesos.
