Un sindicato ha denunciado el robo de más de 300 coches en el parking de la T4 del aeropuerto de Barajas en los últimos cuatro años, a lo que habría que sumar los daños que los usuarios encuentran en sus vehículos tales como ruedas pinchadas, espejos y cristales rotos así o carrocería ralladas.
Ante el problema de los robos, la Policía sospecha de la presencia de algún cómplice entre el personal del aeropuerto. Y es que, según señalan, en un recinto en el que se registra el momento del acceso, no queda ninguna pista del momento en el que salen los vehículos. Los coches, simplemente, desaparecen sin dejar rastro. No hay constancia de que pasen por las balizas. Así que deben contar con una vía de salida alternativa. Lejos de las cámaras de televisión. Y, por el momento, se desconoce esta escapatoria.
Peticiones de los trabajadores
Según señala ABC, los empleados del parking del aeropuerto de Barajas denuncian la falta de personal para realizar la tarea de vigilancia y la ausencia de cámaras de vídeo en buena parte de la superficie destinada al aparcamiento de vehículos y en los pasillos de tránsito. Recordemos que este parking cuenta con seis módulos de cinco plantas cada uno para un total de más de 13.000 plazas.
Por su parte, desde Aena, la compañía pública que se dedica a la gestión de los aeropuertos y de los servicios, se han admitido un total de 28 incidencias entre robos y desperfectos en los vehículos en estas mismas instalaciones. Aunque se excusa, siempre según ABC, en que es una incidencia es “reducida”. Se escudan en que durante todo el 2018 realizaron un total de 3.786.000 operaciones en los aparcamientos del aeropuerto. Señalan que han reforzado el personal para las labores de vigilancia y que cuentan con un circuito cerrado de cámaras. Además, para los afectados ofrecen un seguro que cubre los daños ocasionados.
Sin embargo, los trabajadores no han tardado en desacreditar estas cifras alegando que han sido muchas de 28. Y esperan medidas.
