A partir de hoy, las gasolineras extremeñas están obligadas a tener, al menos, un empleado en el horario comprendido entre las 7 y las 22 horas. Hasta ahora, 95 estaciones de servicio de las 488 existentes en Estremadura no tenían personal. Se trata, principalmente, de las low cost, cuyos precios tienden a ser inferiores al de las gasolineras tradicionales principalmente porque se basaban en el autoabastecimiento.
Las multas a las que se enfrentan los establecimientos que incumplan esta nueva obligación oscilan entre los 3.000 euros, cuando es la primera vez que se incumpla y será la que se aplique durante el periodo de adaptación, y los 15.000 euros, que es la sanción prevista si existe reincidencia. Otras ocho comunidades autónomas ya cuentan con esa medida. Así, en Andalucía, Asturias, Aragón, Baleares, Castilla-La Mancha, Madrid, Murcia y Valencia no está permitido que las gasolineras, durante el horario diurno, estén desatendidas.
Un debate en auge
Guillermo Fernández Vara, el presidente de la Junta, abrió el debate en las redes sociales para saber cuál era la opinión de los ciudadanos sobre la modificación de la ley para obligar a las gasolineras a tener empleados. Paralelamente, se llevó el tema también a la Asamblea de Extremadura, donde el portavoz socialista Valentín garcía defendió la medida para prevenir riesgos a los usuarios, como el derrame de combustible, y para atender a las personas discapacitadas.
Finalmente, a principios de mayo fue aprobada la modificación de la ley con los votos a favor de PSOE y Podemos y la abstención de PP y Ciudadanos. Por tanto, todas las gasolineras deberán tener personal al servicio de los consumidores en el horario que se ha establecido. La única excepción son las cooperativas agroalimentarias que también ofrecen servicios de gasolineras, ya que en ellas se entiende que hay siempre personal para atender a sus socios.
