Portada » Actualidad » 4.000 coches de lujo ‘descansan’ en el fondo del mar

4.000 coches de lujo ‘descansan’ en el fondo del mar

El buque repleto de Porsche, Audi, Bentley y Lamborghini se incendió hace escasas dos semanas. El pasado 1 de marzo acabó por hundirse con nada menos que 4.000 coches de lujo, 1.100 de los cuales eran Porsche.

Hace menos de mes, un buque de carga repleto de coches de alta gama, concretamente 4.000, comenzó a arder mientras cubría la ruta que le debía llevar a Estados Unidos. El incendio comenzó cuando el barco se encontraba a 163 kilómetros de las Azores (90 millas náuticas) y ha durado prácticamente dos semanas. Por fortuna, los 22 tripulantes de la embarcación, bautizada como Felicity Ace, fueron rescatados rápidamente, todo lo contrario que los 4.000 vehículos que finalmente han terminado hundidos en la profundidad del océano una vez que el carguero se hundió a las 9 de la mañana del pasado 1 de marzo.

Modelos, en su totalidad, pertenecientes al Grupo Volkswagen pues en sus bodegas se aglutinaban tanto Porsche como Audi, Bentley y Lamborghini. De esos 4.000 vehículos, 1.100 eran Porsche (confirmado por el propio fabricante), a los que acompañaba algún que otro Urus y varios Aventador, modelo que ya había dejado de producirse y que probablemente tendrá que volver a la cadena de montaje a causa de este incidente. El resto, a repartir entre las marcas mencionadas. Pero lo más preocupante para el conglomerado alemán es la pérdida monetaria pues según la consultora Rusell Group, el fabricante alemán perderá cerca de 155 millones de dólares (unos 135 millones de euros), es decir, casi el 40% del valor de los automóviles que transportaba el barco, que la firma estima en 405 millones de dólares (355 millones de euros).

Mitsui OSK Lines Ltd, el operador del buque, explicó en su página web que habían llegado dos grandes remolcadores desde Gibraltar hasta el lugar en el que se hallaba el buque y estaban rociando la embarcación con agua para lograr enfriar el casco.

Karam El Shenawy

Enamorado del motor y de todo lo que le rodea. La fortuna y las vicisitudes de la vida me permitieron trabajar en mi gran pasión. Cada coche, al igual que cada día, es una oportunidad de aprender un poco más.

Ver todas las publicaciones