El trabajo constante y bien hecho le ha servido a Hankook para lograr unas cotas que difícilmente habrían podido imaginar hace unas décadas. Nacida en 1949, fue en el año 1999 cuando saltaron a la arena internacional con la inauguración de las plantas de Jaixing y Jiangsu en China. Desde entonces, el crecimiento de la marca ha sido imparable. Y, a día de hoy, no conoce límites.
En la actualidad, Hankook cuenta con 5 centros de investigación y desarrollo y 8 fábricas. Cifras que se traducen en más de 22.000 trabajadores repartidos por todo el mundo. Estos, además, producen más de 104 millones de neumáticos al año y buscan el mejor producto para el cliente final.
En Europa cuentan con una planta a la vanguardia de la producción en Rácalmás (Hungría), que inauguraron en 2007; así como otros centros repartidos por todo el continente. A ellos se ha sumado un centro de pruebas invernales en Ivalo (Finlandia).
Lo último de lo último
Gracias a la importante inversión en I+D, han creado en los últimos tiempos los neumáticos con tecnología Sealguard; estos permiten el sellado de los pequeños pinchazos para continuar con la ruta. También la vertiente Sound Absorber, que supone la inclusión de una capa de poliuretano que minimiza el sonido que producen los neumáticos al girar. Esto les ha otorgado los valores de la etiqueta europea.
El nivel de prestaciones, eficiencia y durabilidad de los neumáticos de Hankook les han llevado a ser requeridos por los principales fabricantes de coches a nivel mundial. Un total de 312 modelos de 45 marcas llegan a los concesionarios equipados con neumáticos de firma surcorena. Así, destacan modelos tan distintos como el BMW Serie 7, el Audi Q7, el Nissan Navara, Audi RS5 o Mercedes-Benz Clase S.
El banco de pruebas de Hankook
Un excelente lugar en el que probar y desarrollar sus compuestos y comprobar su rendimiento ante las más duras exigencias es la alta competición. Se le puede ver como proveedor único de neumáticos del DTM alemán, por ejemplo.
También en la Audi Sport TT Cup y la Fórmula 3 europea. Además, es un habitual de pruebas de resistencia o drifting. E, incluso, citas míticas, como la subida a Pikes Peak. Hoy día su oferta abarca no solo automóviles sino, también, vehículos comerciales, camiones, autobuses y competición.
