La Universidad de Berkeley ha propuesto una nueva forma de evitar los atascos y favorecer las ventas de los coches autónomos. Su idea es crear un carril por el que se pueda conducir a 195 km/h con este tipo de vehículos, para que puedan explotar al máximo sus características.
Los coches autónomos pueden ser la clave para acabar con los atascos en las grandes ciudades. Aunque aún falta tiempo para que salgan al mercado a un precio asequible para todos los bolsillos, los expertos ya empiezan a plantear formas para que puedan compartir espacio con los coches conducidos por los humanos.
Carreteras separadas
Hyperlane sería un carril exclusivo para que los coches autónomos puedan explotar todo su potencial sin tener que lidiar con los errores humanos. Se trataría de un carril más con conexión 5G por todo su recorrido cuyo coste sería de cerca de 7 millones de euros por kilómetro, una cifra que, aunque parezca desorbitada, es hasta diez veces inferior a la de algunas líneas de alta velocidad. Por él, los coches que no precisan de conductor podrían alcanzar una velocidad de 195 km/h.
La idea es que por el carril también puedan circular autobuses autónomos, cuyo tiempo en recorrer la misma distancia se reduciría drásticamente, favoreciendo a todos los pasajeros. Al estar todos los vehículos conectados entre sí, en este carril los accidentes de tráfico serían, mayoritariamente, provocados por terceros.
Se trata de una interesante propuesta que aún necesita dar muchos pasos antes de hacerse realidad. Los coches autónomos aún tienen limitaciones legales que superar, por lo que se prevé que hasta el año 2040 no podremos ver estos carriles en nuestras ciudades. De momento, tendrás que conformarte con el carril Bus-VAO si tu vehículo puede circular por él.
