Sí, tal y como suena: el Hyundai i30 N mantiene la garantía aunque lo metas en un circuito. Si uno se compra un coche de 275 CV (hay una versión de 250 CV) y con unas prestaciones que enamoran es para dar rienda suelta a su potencial… y eso es mejor dejarlo para los trazados.
La dirección de la compañía entiende que los propietarios de la variante más deportiva del Hyundai i30 quieran pasarlo bien y comprobar las prestaciones de su nuevo coche, como hicimos nosotros en nuestro primer contacto. Y la mejor manera es hacerlo es en un circuito que cumpla las condiciones de seguridad necesarias (en un track day, por ejemplo) o durante una jornada de conducción deportiva en una carretera cerrada al tráfico.
Así responde el Hyundai i30 N… dentro vídeo
Eso sí, tendrás que tener cuidado igualmente: según nos han indicado desde Hyundai , el i30 N perderá la garantía si se le causa algún daño al vehículo por uso negligente del mismo, ya sea estructural (al participar en una carrera, por ejemplo) o mecánico: dañar el embrague o el turbo por mantener el motor demasiado tiempo alto de vueltas si has pretendido derrapar, realizar un paso por curva rápido o superar la velocidad máxima homologada también anulará la garantía, por nombrar alguno de los “desastres” que pueden ocurrir si “nos venimos arriba”.
La mejor opción para el circuito
Si eres propietario de un Hyundai i30 N y no eres demasiado ducho al volante o no tienes demasiada experiencia, lo mejor que puedes hacer es participar en una jornada de conducción en la que también haya monitores y pilotos profesionales que te enseñen cómo extraer el máximo rendimiento del coche sin dañar la mecánica.
Eso sí, si participas en una sesión de este tipo, la garantía no cubre, como no lo hace con ningún otro vehículo del mercado, el desgaste que puedan sufrir algunos elementos, como los neumáticos o los frenos. Si terminas “en las lonas” es tu problema… y tendrás que sustituir las cubiertas tú.
