Te pones al volante, extremas la atención de todos tus sentidos para que no se te pase nada y, al más mínimo despiste, multa. La revista Tráfico y Seguridad Vial que edita la Dirección General de Tráfico (DGT) ha hecho un ranking con las 10 infracciones más frecuentes y peligrosas que cometemos en España. Y, a decir verdad, no todos extremamos tanto las precauciones como nos gusta pensar. ¡Descubre las infracciones más frecuentes de España!
1. Circular sin dibujo en los neumáticos
La profundidad mínima del dibujo de las ruedas está establecida en 1,6 mm, es recomendable que estén por encima de los 2 mm (esta es la profundidad mínima legal en países como Alemania) y se empieza a perder adherencia cuando baja de los 4 mm. Circular con una profundidad inferior a los 1,6 mm se considera infracción grave y se sanciona con 200 euros.
2. No tener el alumbrado adecuado
Esto puede ser porque no se hayan encendido las luces cuando deben estar conectadas (de noche, en el amanecer y el anochecer, cuando llueve…), porque den poca luz o porque uno de los faros esté fundido. Está establecido como infracción grave y se penaliza con 200 euros.
3. No poner el intermitente
No, no están de adorno. Tú sabes que vas a girar o cambiar de carril en un momento concreto pero los demás también deben conocerlo para adaptar su velocidad o disposición en la carretera ante tus giros. También está tipificado con sanción grave y conlleva una sanción de 200 euros.
4. Abrir la puerta sin comprobar si viene alguien
Parece una acción que no reviste peligrosidad alguna pero las motos, ciclistas o coches que circulan por la calle no esperan que se abra de pronto una puerta. Este susto puede provocar un volantazo; o, directamente, se les puede dar a la puerta si circulan cerca de la fila de coches aparcados. Es un comportamiento que está sancionado con 260 euros. Así que, antes de abrir, mira por el retrovisor o gira la cabeza para comprobar que no se acerca nadie.
5. Aparcar sobre la acera
Los vehículos tienen su zona acotada para aparcar delimitado normalmente por líneas blancas o de otros colores si está regulado su uso por tiempo o porque hay que pagar. No se puede aparcar sobre la acera pues se invade un espacio destinado a los peatones, que no podrían transitar con normalidad, y las sillas de ruedas, que se verían incapaces de pasar por aquí. Se considera falta grave y la multa es de 200 euros.
6. Detenerse en una parada de autobús
Aunque vaya a ser “un momentito de nada”, si llega este se genera un problema para el tráfico. Pues el bus esperará a que se le deje el espacio junto a la marquesina; y también porque, en caso de que abra la puerta fuera de su sitio, podría propiciar que un grupo de personas circulen en la calzada. ¿La multa? 200 euros.
7. No detenerse en un Stop
La diferencia entre un Stop y un ceda el paso es que en el primero hay que detenerse de forma obligatoria y en el segundo hay que reducir la velocidad y uno solo se para si se acerca un vehículo. El problema es que muchos confunden ambas señales y no frenan ante un Stop como corresponde, corriendo así un riesgo innecesario. La multa aquí es de 200 euros y 4 puntos del carnet.
8. Llevar la carga mal colocada
Esto es algo que afecta principalmente a los conductores profesionales. Los bultos que se transporten han de estar bien repartidos en el cajón de carga; además de bien asegurados. Hay que evitar que alguno de ellos se pueda desprender y caigan a la vía, por el consiguiente peligro que esto puede suponer para el resto del tráfico. Esta infracción está penalizada con 500 euros.
9. No reducir la velocidad al acercarse a un paso de peatones
Un peatón tiene preferencia al cruzar un paso de cebra. Así, todos los vehículos tienen la obligación de reducir su velocidad cuando se acercan a uno por si, al llegar a este, se encontraran con alguien que desea pasar. El objetivo es evitar una frenada en el último momento; una acción que conlleva el riesgo de colisión con los coches que siguen, que podrían no reaccionar a tiempo. La sanción establecida es de 200 euros.
10. Circular por el carril que no corresponde
Aunque no lo parezca, por los comportamientos que vemos en nuestras carreteras, uno debe circular por el carril más a la derecha posible. Este solo se debe abandonar para adelantar o porque hay que permitir el acceso a la vía a otro vehículo que se encuentra en el carril de incorporación. Sin embargo, son muchos los que se creen que el carril central o de la izquierda es de suyo y no encuentran la necesidad de ir al de la derecha. La Guardia Civil podría multar este comportamiento con 200 euros.
