El Mercedes-Benz EQC 2019 es el primer coche eléctrico de serie de Mercedes. Un modelo pionero que abre la era de la electrificación del gigante del automóvil alemán. Se trata de un SUV de gran tamaño (4,7 metros), equipado con la última tecnología. Sus dos motores eléctricos aportan 408 CV de potencia y cuenta con una autonomía de 415 km con una sola carga.
El interior del Mercedes-Benz EQC posee numerosos detalles exclusivos. Incluye el formato ya habitual de Mercedes de sus nuevos modelos, con doble pantalla de 10,25 pulgadas en su última actualización (incluida de serie). Pero aparecen una serie de cambios con respecto a otros modelos SUV del fabricante.
La carrocería de gran tamaño, además de facilitar la instalación de una batería de mayor capacidad, proporciona una buena habitabilidad. En este caso está a la altura del Mercedes-Benz GLC, del que recibe una buena parte de órganos mecánicos y técnicos.
La configuración de la parte baja de la carrocería eleva mucho el piso, un aspecto que se nota a la hora de acceder al interior del Mercedes-Benz EQC. El marco inferior de las puertas está inusualmente elevado. Otros detalles que cambian en comparación a sus hermanos con carrocería SUV es que no hay aireadores redondos y sí molduras que intentan imitar un amplificador musical. En España se ofrece de serie con el acabado Electric Art, con detalles en color oro rosado.
A pesar de esta elevación del suelo y de su forma semi cupé, cuenta con un espacio correcto en la parte trasera. En el salpicadero, el cuadro digital ofrece diferentes vistas y sustituye el tacómetro por un potenciómetro sencillo de entender. Desde el volante multifunción, se pueden activar numerosos asistentes, incluso una ayuda a la maniobra de esquiva. Por otra parte, las levas controlan la frenada regenerativa del eléctrico en 5 niveles.
Los detalles en color cobre de las rejillas del aire también son llamativos y dan personalidad al conjunto. En lo que respecta a la pantalla multimedia, la situada en el lado derecho del panel, alberga el control de las aplicaciones específicas para el control de la carga y la gestión de la batería. Por último, en la consola, el panel táctil sustituye a la ruleta para usar el infotainment, un sistema, a priori, más intuitivo.
Al igual que el resto de la gama Mercedes-Benz, los paquetes de personalización del Mercedes-Benz EQC 400 4MATIC (única versión a la venta) son muchos y variados. Destaca especialmente el paquete AMG Line, que confiere al vehículo mayor deportividad. Incluye volante deportivo multifunción en napa perforada para la zona de agarre y asientos deportivos con gran sujeción lateral.
Otra opción de personalización exclusiva de Mercedes es el paquete AIR-BALANCE. Con él se ambienta el habitáculo, con una fragancia individual adaptada a las preferencias personales y estado de ánimo del conductor. Además, mejora la calidad del aire de a bordo gracias a la ionización de éste.
Fotos (360 y estáticas): Paloma Soria.