Madrid está estudiando poner en marcha una nueva ordenanza de movilidad urbana por la que pretende alejar a los patinetes eléctricos de algunas calles del centro de la ciudad. Se trata este de un medio de transporte cada vez más popular en la capital. Hay quien cifra en 5.000 unidades las que se pueden ver habitualmente, capaces de alcanzar velocidades de hasta 30 km/h y que se ha posicionado como una excelente alternativa a los medios de transporte urbanos tradicionales.
Ahora, sin embargo, con esta nueva regulación, el futuro del patinete eléctrico en Madrid se tiñe de oscuro. A continuación, mostramos un mapa con las nuevas áreas de uso que señalan una nueva regulación que se debería aprobar a la vuelta de las vacaciones de verano.
Nueva normativa en camino
Esta normativa pretende categorizar de A a C2 los nuevos medios de transporte madrileños, tales como bicicletas y patinetes eléctricos. Así, dependiendo de preceptos como la velocidad máxima, la masa, el ancho máximo o la peligrosidad, se les ha limitado el acceso a unas zonas u otras pensando en las dificultades de cohabitación con el resto de usuarios de las vías.
Con la nueva regulación en la mano, los patinetes se encontrarían en las categorías A y B. Esto significa que no podrán circular por la calzada, ciclocarriles (los carriles habilitados para bicicletas en plena calzada), carriles protegidos y las calles de un carril limitada a 30 km/h.
Algo que no solo limita su capacidad de acción,sino que hace que sea muy difícil poder moverse entre dos puntos de la capital utilizando varias calles seguidas aptas para los patinetes eléctricos.
Los colores expuestos en el mapa representan con el marrón al anillo ciclista; el rojo muestra los carriles bici; el naranja a las pistas de bici; el morado a las denominadas aceras bici y el azul son los tramos de encaminamiento.
Quejas por doquier
No son pocos los que se han quejado de la nueva normativa en las redes sociales. Expresan así su descontento con esta nueva normativa; pues limita el uso de un vehículo ecológico por el centro de la capital. Y esto, precisamente en un momento, en el que el consistorio pretende expulsar los coches más veteranos y contaminantes.
Así, son muchos los que no entienden que se limite un vehículo eléctrico que sustituye, en muchos casos, el uso del coche o la moto particular. Sobre todo, porque el coste de cada uno de estos patinetes eléctricos se sitúa en torno a los 300 euros.
