Conducimos por primera vez el Porsche Taycan, en sus dos versiones de 680 y 761 CV.
Ya hemos podido tener en nuestras manos el nuevo Porsche Taycan, el primer Porsche eléctrico de la historia. Lo hemos probado además en una larga ruta de 700 km entre Ámsterdam y Luxemburgo. El objetivo: comprobar el alcance real de su autonomía declarada, de 450 km para el Turbo de 680 CV y 412 en el Turbo S, de 761 CV.
La respuesta la tendrás detallada en el reportaje. Como avance de nuestras impresiones, hay que decir que ambas versiones son muy similares en cuanto a la conducción diaria. Las diferencias sólo se pueden extraer en apartados como el de la aceleración o si rodamos por un circuito. El nuevo Porsche Taycan integra además innovaciones en el segmento como el uso de una caja de cambios de dos velocidades para el motor trasero (tiene otro en el delantero): la primera para grandes aceleraciones y la segunda para reducir el consumo de energía.
Frenada regenerativa y secretos de carga
Tantos kilómetros de prueba dan para mucho, por lo que hemos podido comprobar cómo funciona su práctico sistema de frenada regenerativa, mucho más suave y progresivo que el de otros eléctricos. Además, también lo hemos cargado en un punto de recarga ultrarrápida Ionity. Su batería de alta capacidad (93,4 kWh) recibió una carga de 270 kW para aumentar del 5 al 80% en apenas 20 minutos.
Aprovechamos en este punto para explicar también cómo funciona un punto de recarga ultrarrápido como los de Ionity, que ya están perfectamente asentados en las carreteras europeas. Estos puntos de recarga avanzados permiten a eléctricos de nueva generación como el nuevo Porsche Taycan recargar rápidamente sus baterías de alta capacidad, en menos de media hora. De lo contrario, una carga convencional, con un enchufe convencional, se podría ir hasta casi los dos días de duración.
