El municipio de Cambrils (Tarragona) será el primero en introducir los pasos de cebra ‘inteligentes’, dotados de la tecnología LED.
La responsabilidad de evitar accidentes de tráfico siempre ha recaído sobre las personas pero, ¿se imaginan que ahora los pasos de cebra también tuvieran parte de esa responsabilidad? Puede parecer extraño, pero desde hoy ya es una realidad.
El municipio tarraconense de Cambrils puede presumir de haber sido el pionero en España en la instalación de los primeros pasos de cebra ‘inteligentes’, cuyo objetivo será velar por la seguridad de los ciudadanos y alertar a los conductores sobre la presencia de peatones en la carretera, de manera que les de tiempo a reaccionar.
Pasos de cebra ‘inteligentes’, ¿cómo es posible?
Podría ser uno de los avances más inesperados para luchar contra los, aproximadamente, 11.000 atropellos que cada año se producen en las carreteras, pero la base de la idea resulta increíble y efectiva. Acompañados por dos señales verticales en cada extremo de la calzada, estos pasos de cebra funcionan mediante unos sensores de presión, instalados en las inmediaciones del paso de cebra, que detectan la presencia de personas a la hora de cruzar la calle.
En este caso, se encienden unas luces LED situadas en las citadas placas verticales, junto a las clásicas líneas blancas tradicionales. Así, tanto de día como de noche, su sistema de iluminación se pone en funcionamiento coincidiendo con el encendido del alumbrado público.
Un proyecto aplicable en otros campos
El paso de cebra ‘inteligente’ se posiciona como un novedoso proyecto de Urban Lab, que también se ha encargado de introducir en Cambrils varias marquesinas de autobuses que se iluminan gracias a placas solares, una estación de recarga de vehículos eléctricos y la implantación de luces LED en los semáforos del municipio.
A la vez, su tecnología no solo se traslada a estos campos o queda fijada en los pasos de cebra, ya que las señales de stop, un ceda el paso, una curva peligrosa o cualquier otra ítem cuenta con la autonomía necesaria para iluminarse y evitar accidentes.
Gracias a una inversión de entre nueve mil y diez mil euros, no solo se incrementa la seguridad de los viandantes y los pasajeros de coche, sino que también se consigue un ahorro energético considerable gracias al bajo consumo de las bombillas LED y al aprovechamiento de las energías renovables.
