Portugal prohíbe la pernocta en autocarvanas situadas en las calles.
Los amantes de las autocaravanas y las furgonetas camperizadas tienen cada día más difícil disfrutar de su afición y su tiempo de ocio. Si su uso en España está muy acotado, ahora es el país vecino el que empieza a limitar su utilización. Portugal ha puesto en marcha una nueva normativa por la que prohíbe la pernocta libre en este tipo de vehículos. Ya no se podrán aparcar en espacios públicos.
Esta nueva legislación llega con la puesta en marcha de un decreto ley (102-B/2020), en realidad la adaptación de una transposición de una directiva europea (2020/612), por la que se prohíbe las pernoctaciones en aparcamientos o lugares públicos, tales como calles o lugares que no estén expresamente autorizados para ello.
Y, por pernoctar en una autocaravana entienden mantenerse en el interior en un horario comprendido entre las 21:00 y las 7:00. Aunque no estén durmiendo. Esto limita mucho su uso pues tampoco se podrán utilizar los servicios que esta pueda tener como la cocina o el baño.
Queja de los vecinos
Esta normativa llega como complemento a otra que ya se puso en marcha el año pasado cuando se limitó el aforo de las playas. Portugal ha sido siempre un destino muy atractivo para los amantes de las autocaravanas, especialmente tras la proliferación de leyes que limitaban su uso en otros países europeos (en España solo se pueden utilizar en camping).
Esto hacía que cada vez hubiera más vehículos de este tipo en verano en sus playas hasta el punto de copar un buen porcentaje de sus aparcamientos. Así, primero las autoridades intervinieron para reducir el aforo de estas playas y, ahora, llega la expulsión de esos vehículos de sus aparcamientos.
Algunos de los motivos esgrimidos para esta decisión han sido la falta de civismo de sus usuarios en la utilización del espacio de alrededor del vehículo, las altas horas a las que seguían haciendo ruido y el modo en el que vaciaban los depósitos de residuos.
Y, quien no cumpla con esta norma, se expone a una multa que varía entre los 60 y los 300 euros. Aunque esta puede llegar a los 600 euros si el vehículo está aparcado en un espacio protegido.
Estimado Carlos Olmo, pone usted en su artículo “(en España solo se pueden utilizar en camping)” refiriéndose a las autocaravanas y camper. No sé de donde ha sacado esa afirmación, porque en España ni en el resto de la UE está prohibido pernoctar en las calles. Otra cosa es la acampada que sí está prohibida.
Los periodistas deban ser escrupulosos en la información y estar correctamente informados porque sus artículos los lee mucha gente, convirtiendo en desinformación lo que debería ser información. La diferencia entre un buen periodista y uno mediocre es que el primero investiga y es original en su redacción, el segundo copia y pega.
La falta de civismo con ruidos hasta altas horas de la noche es falso, la media de edad en el uso de estos vehículos es muy alta, muchos jubilados o trabajadores del sector de educación con más tiempo para dusfrutar de este tipo de turismo.
La edad media va bajando, pero por su alto precio de 60.000 a 90.000€ no es un vehículo para todas las economías.
Respecto a que ocupan todos los aparcamientos en zonas de turismo como playas es absolutamente falso y con una falta de rigor extrema, el parque de autocaravanas en España es de 65.000 unidades, el de turismo es de 30.000.000 de turismos, siendo el impacto de estos muchísimo mayor en la ocupación de aparcamientos en sitios turísticos.
El sector del camping y hoteles tacha a los autocaravanistas como competencia desleal de su sector, como si comer en casa fuese competencia desleal de los restaurantes. La hostilidad del sector camping y hoteles contra las autocaravanas en España viene de lejos, con varias sentencias perdidas ante los tribunales contra los derechos de los autocaravanas a la pernocta. Siendo un país como España donde el sector turístico tiene un gran peso en nuestra economía es inaudito la poca altura de miras en la promoción de este turismo de calidad que genera ingresos incluso en meses donde el turismo tradiciones es muy bajo.
El autocaravanismo necesita regulación, no prohibición.